El Rinoceronte Negro Occidental, una extinción decretada por la caza furtiva

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Declarado oficialmente extinto en el año 2011 por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el Rinoceronte Negro Occidental es otra de las subespecies africanas que lamentablemente sucumbieron ante la nefasta intervención del ser humano, el cual en la mayoría de los casos, actúa influenciado por la codicia y la apetencia de obtener grandes sumas de dinero, sin darse cuenta del grave daño que ocasionan no solo a los animales, sino a todo el ecosistema terrestre en general. Emparentado directamente con el Rinoceronte Blanco, aunque en realidad ambas subespecies son de color gris, este majestuoso mamífero era un poco más pequeño que su pariente, llegando a pesar los 1.250 kilogramos y medir más de 1.5 metros de altura y 3.5 de largo, presentando una única y marcada diferencia en la parte de su boca, ya que sus labios eran redondeados o punteados, mientras el Blanco presentaba una boca con labios rectos y rectangulares de forma cuadrada.

Sus imponentes cuernos, su maldición

Los Rinocerontes Negros Occidentales eran comúnmente vistos en las grandes planicies del centro y el oeste del continente africano, lucían 2 prominentes cuernos en la parte frontal de su cara, uno con más relevancia que el otro el cual sobrepasaba fácilmente el metro de longitud en etapa adulta y estaba perfectamente diseñado para defenderse de cualquier depredador en defensa de sus crías, o en caso de los machos para enfrentarse a los demás de su género en lucha por los derechos exclusivos de un territorio en particular, mientras el cuerno más pequeño podía alcanzar los 50 centímetros de largo. Lamentablemente para esta subespecie, estos increíbles atributos que la naturaleza les adjudico se convirtieron en su propia maldición, ya que estos cuernos empezaron a cobrar un significativo valor en el mercado negro tanto africano como el asiático para mediados del siglo XX, donde gozaba de gran demanda debido a las supuestas propiedades medicinales milagrosas que los mismos contenían, provocando la matanza de este noble e imponente animal para hacerse de sus cuernos, lo que produjo un descenso significativo de su población para finales de los años 70, calculándose que para el año 2000 tan solo sobrevivían unos 15 ejemplares en estado salvaje, más otros 20 que se mantenían en cautiverio, los cuales desaparecieron completamente para el año 2005 sin ningún tipo de posibilidades de proyectos de cría y reinserción de la especie.

Nombre Científico:     Diceros bicornis longipes.
Nombre Vulgar:       Rinoceronte Negro.
Clase:                      Mammalia.
Orden:                   Perissodactyla.
Familia:                Rhinocerotidae.