Su curiosa forma osezna con rasgos de roedor lo convierten en un enigma de la naturaleza

Con un extraordinario y curioso aspecto de tierno osito de peluche, el Wonbat es un hermoso animal endémico de Australia, un gigantesco país rico en diversidad de hábitats naturales especialmente estructurados para diferentes especies de marsupiales tanto herbívoros como carnívoros, donde sobresalen los Canguros, Koalas, el Demonio de Tasmania, el Bandicut, y las 3 subclases del género Vombatidae, el Wonbat Hocico Peludo del Sur (Lasiorhinus latifrons), el Wonbat del Norte (Lasiorhinus krefftii) y el Wonbat Común (Vombatus ursinus), los cuales han logrado adaptarse perfectamente a las variantes climáticas y biogeográficas presentadas en sus respectivas regiones.

Su extraña y curiosa forma osezna con rasgos de roedor lo convierten en un verdadero enigma de la naturaleza, resaltado aún más con la facilidad que cuenta para adaptarse perfectamente a diversos ambientes naturales donde prevalezca un clima templado o fresco como bosques o zonas montañosas ricas en maleza.

De patas sumamente cortas pero poderosas las cuales utiliza conjuntamente con sus dientes para cavar sus extensas madrigueras, los Wonbat son animales de hábitos nocturnos, aunque frecuentan salir de tarde en días frescos o nublados en busca de su alimento, conformado principalmente por diferentes tipos de hierbas y raíces encontradas en el subsuelo, y cuentan con uno de los metabolismos digestivos más lentos del reino animal, ya que tardan hasta 2 semanas en digerir completamente los alimentos.

En completo desarrollo, un ejemplar de esta especie puede llegar fácilmente a pesar más de 30kg, y medir 1 metro desde la punta de la nariz hasta la cola, mostrando un pelaje de color marrón claro o beige, o en algunas especies un negro suave o gris oscuro.

En Peligro Crítico de Extinción

El Wonbat del Norte es el miembro más vulnerable y amenazado de esta familia, el cual ya ha sido colocado en la lista roja de los animales en peligro crítico de extinción de la UICN, debido principalmente a la alta tasa de mortalidad presentada en los últimos 5 años, fenómeno atribuido a los duros cambios climáticos experimentados, los cuales han derivado en cruentas sequias en muchas regiones de este país, así como a la contaminación de algunas especies de hierbas o plantas por los excrementos de algunas especies de bovinos como el búfalo, las cuales al ser consumidas, provocan graves problemas de salud y una muerte inminente que están siendo investigadas minuciosamente en estos momentos.